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Desde hace ya varios años, J.K. Rowling ha dejado de ser noticia por sus libros o por los proyectos cinematográficos basados en su obra. En cambio, su nombre resuena en los titulares por las polémicas declaraciones que publica en X (antes Twitter).
La última de estas controversias ha surgido a raíz de una indirecta que lanzó a los actores que dieron vida a los protagonistas de la saga que la catapultó a la fama: Daniel Radcliffe, Rupert Grint y Emma Watson.
Todo comenzó con una pregunta publicada por el usuario @tradingMaxiSL: «¿Qué actor o actriz te arruinó instantáneamente una película?». La respuesta de Rowling fue tan escueta como incendiaria: «Tengo tres ideas. Lo siento, pero era inevitable».
Como no podía ser de otra manera, esas tres ideas parece que iban dirigidas a los actores protagonistas, los cuales se habían desmarcado anteriormente de la escritora ante todos sus mensajes de carácter tránsfobo.
La verdad es que no tengo ni idea de qué es lo que busca la autora que está detrás del seudónimo de Robert Galbraith con este tuit. Me niego a pensar de que sea por la inquina que tenga por lo que hayan dicho los actores que encarnaron a los personajes que la hicieron millonaria.
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Más allá de esta polémica, he de confesar que, además de Harry Potter, uno de los libros de J.K. Rowling me leo con más frecuencia es «Vivir bien la vida», que recoge un discurso muy motivador que la escritora dio una vez en Harvard.
Lo leo de vez en cuando porque tiene algunas ideas que me parecen muy brillantes y que nada tiene que ver con lo que la escocesa muestra en sus redes sociales.
En particular, es muy interesante cómo defiende la importancia de la imaginación en su vida y como, incluso en los más oscuros momentos, puede surgir algo de luz.
Creo que me voy a quedar con eso, y olvidar todo lo que está diciendo en Twitter.
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